GP de Hungría: así lo vimos

Este domingo se corrió la décima carrera del calendario del 2009 en el Hungaroring, en Budapest, Hungría. Fue una carrera un tanto extraña, que nos hizo recordar temporadas pasadas por los resultados que se vieron. Pero, ¿cómo fue este Gran Premio? Así lo vimos:


El retorno de los grandes

Porque no se le puede llamar de otra forma al dominio que mostró McLaren en el fin de semana, a pesar de ser superados en la calificación por Red Bull y un Renault sorprendente que, desafortunadamente para su causa, un error en pits y la salida de una llanta en plena carrera, calificado como negligencia por los oficiales posteriormente, los borró del mapa de esta carrera y de la próxima. Ferrari da muestras de vida después del accidente de Massa el sábado con un segundo lugar del impertubable Raikkonen, que se mostró sereno, además de salir bien librado por una manoibra de él en la arrancada que pudo causar un accidente mayor. McLaren sumó 14 puntos (exactamente lo que tenía acumulado hasta este Gran Premio) y Ferrari, sin un piloto en pista, sumó 8. Ambos equipos se ven fuertes para este cierre de temporada, y parece que podrán lograr puntos importantes para la estadística.

Eterno escudero y escudería favorecida

Quien no estará favorecido (y parece que, desafortunadamente para él nunca lo ha estado) es Rubens Barrichello, ya que su décima posición, aunado con una evidente inclinación de equipo hacia Button y, para colmo, la presión por haber sido una parte de su auto la que causó el percance de Massa, parece despedirse de cualquier oportunidad por disputar el campeonato de pilotos. Una lástima para el piloto más experimentado de la Fórmula 1. Ojalá las comparaciones no empiecen entre este eterno escudero y el mítico Stirling Moss. Button puede dormir tranquilo a pesar de que su suma de puntos ha bajado considerablemente desde el GP de Turquía. ¿Por qué? Simplemente porque la aparición en escena de los autos rojo escarlata y plateados seguramente disputarán puntos importantes que, hasta Alemania, parecía que quedarían en manos de un Red Bull que sigue en ascenso. Brawn, puede estar tranquilo en cuanto a la estadística ya que sigue superando a Red Bull en el Campeonato de Constructores, mas es evidente que la aparición de Ferrari y McLaren (y Williams y Toyota) solo será para cubrir un barco que cada vez hace más agua.

¿Señales de vida?

Quien parece que, al menos este GP, dejó de hacer agua, fue Toyota. El sexto de Glock y el octavo puesto de Trulli dan señales de que Toyota puede levantar (lentamente, pero finalmente adelante) sólo teniendo un auto confiable ya que la confiabilidad ha demostrado ser crucial en esta categoría. Asimismo, la escudería de Frank Williams regresa y finalmente logra consolidar (en cierta medida) los resultados de las prácticas de los viernes en puntos, que ubican a al hijo de Keke Rosberg, Nico Rosberg, en el quinto lugar de la clasificación, solo debajo de los Brawn y los Red Bull.

Los advertidos

Son los miembros del equipo Red Bull, ya que lo que parecía ser el inicio de una segunda parte de temporada de ensueño, ahora se ve un camino largo y complicado en pos de los títulos de pilotos y constructores. Más allá de la disputa interna sobre qué piloto favorecer (que puede variar conforme pasan las carreras y los afectaría sin remedio alguno) para disputarle a Jenson Button el campeonato de este año, se ve un entorno dificilísimo con la aparición de los grandes ausentes (hasta ahora) de la Fórmula 1. Además, la salida de Vettel por problemas mecánicos indica que el RB5 tiene un límite de exigencia, por lo que deberán de poner más atención en el desarrollo de la confiabilidad del auto. También, los oficiales de la carrera hicieron una llamada de atención fuerte al equipo por la salida de de pits Mark Webber en la que casi colisiona en la calle de pits con el F60 de Kimi Raikkonen.

Los desesperados negligentes

La francesa Renault, después de un prometedor viernes y sábado, terminó el fin de semana con un piloto fuera y con otro lejos de sumar su primer punto del año. Mas lo peor no fue otra actuación mediocre de Piquet Jr., sino el hecho que, a pesar de que ha mejorado en R29, no tiene lo suficiente como para disputarle a los autos de Red Bull, McLaren, Brawn o Ferrari. La estrategia de Alonso de salir ligero no funcionó con un Hamilton agresivo y veloz; además, el rápido desgaste de las llantas del auto en tempranas vueltas de la carrera terminaron ser la perdición para él e, increíblemente, también el equipo e inclusive para quien parece no tendrá vela en el entierro. El error en pits con la llanta delantera derecha y la negligencia al dejar salir a pista a Alonso con una llanta mal colocada, con el percance de Massa fresco, condenó, primero, las aspiraciones a los puntos del español y, posteriormente, la carrera y, para rematar, la posibilidad de correr el GP de Europa que, paradójicamente, se corre en España en un claro intento de aprovechar de la fama y popularidad del español.

Las decepciones

Nuevamente, Force India, a pesar de sus recientes progresos, quedó marginado de la zona de puntos y, lo que es peor, con problemas en el VMJ02 de Adrian Sutil. Toro Rosso mostró que no tiene nada qué mostrar salvo al español Alguersauri, ya que nuevamente quedaron relegados de los puntos y sin un avance aparente. BMW, después de ser una propuesta nueva el campeonato pasado, sigue sin figurar y sus pilotos, sin sumar puntos. Heidfield y Kubica, siguen hundidos - y sin una salida plausible por el momento - en un hoyo de mediocridad absoluta, ya que ambos apenas suman 8 puntos, apenas suficientes para superar los 5 del segundo equipo de la Red Bull, Toro Rosso, y del patético Force India.